La historia siempre viene a demostrar que para (casi) todo hay precedentes, lo que pasa que en esta era de contestadores automáticos, comida rápida y ligues de una sola noche nadie recuerda lo que pasó hace unos días, con lo que recordar lo que pasó hace veinte años suena a prehistórico.
Con un país "corruto" como es España, donde no sólo los políticos son amigos de lo ajeno (piratería, copiar exámenes, pagos sin factura, colarse en el transporte público, etc.) y ahora que todo el mundo quiere el fin de los partidos políticos actuales, o sea, PP, PSOE y CIU, conviene ver el ejemplo de nuestros vecinos italianos: gente inteligente y pragmática que ya quisieron cambiar esto hace dos décadas y la cagaron miserablemente.
Todo empezó en 1983, cuando por primera vez en la historia, los socialistas italianos lograron ganar las elecciones y Bettino Craxi (1934-2000) fue elegido primer ministro. Por cosas de las mayorías, se formó un gobierno de nada menos que cinco partidos de todo pelage: socialistas, democristinaos, liberales de derechas (?), liberales de izquierdas (???) y socialdemócratas. La idea era buena, gobierno de consenso, fin del dominio de la derecha que gobernaba desde la II Guerra Mundial (aunque esta seguía formando parte del gobierno) y comienzo de una nueva era a la espera de más limpieza y menos corrupción...
¿Qué ocurrió? pues que en vez de acabar con la corrupción, esta se extendió a todos los partidos políticos y a la judicatura, la operación Manos Limpias del fiscal Di Pietro acaba con el presidente Craxi en búsqueda y captura. Este huye a Túnez, donde finalmente fallecería.
¿Resultado? todos los partidos políticos resultan salpicados, salvo la extrema derecha del MSI que ya en 1993 había logrado las alcaldías de Roma (Gianfranco Fini, actual presidente del congreso y ex socio de Berlusconi) y Nápoles (Alessandra Mussolini, la nietísima), aparece el feroz nacionalisno de la Liga Norte y en las elecciones de 1994 Berlusconi gana con un partido llamado Forza Italia, que aglutina todo el descontento de los votantes de uno y otro lado, el resto ya lo conocen.
¿Y la izquierda?, bueno, limpios sólo quedaron los comunistas pero comienzos de los 90 no eran buenos tiempos para el PCI, (históricamente el partido comunista con más apoyos en el mundo democrático) ya que la caída del "muro de Berlín" y su ideología trasnochada provocan su declive.
Los italianos, como ya he dicho, no son tontos y enseguida calaron a Berlusconi, quien perdió las elecciones de 1996 contra la coalición de izquierdas liderado por Romano Prodi llamada El Olivo, pero las discrepancias internas acabaron con el regreso de Il Cavaliere, luego vino la crisis y Monti. Actualmente el país está sumido en una crisis política y económica profunda, tienen su propia Bankia y hay auténtico miedo al resultado de las próximas elecciones.
¿Moraleja? que cada cual piense la suya, por mi parte no veo en IU ni en UPyD nada más que buenas palabras y escaso realismo. Jesús Gil ya no pertenece al mundo de los vivos, pero otro puede aparecer que lo haga bueno. El que avisa no es traidor.
2 comentarios:
Lo que dices me inquieta mogollón, dacosica. Cualquier día la Casa Real sanciona un decreto que obligue a toda familia a dar a su primogénita como "asesora" del Rey (¡Glups!)
Italia, España, Grecia, Portugal......mas o menos todas igual, la educacion, la ineptitud, la politica................
Esperemos que nuestros ojos vean mejores cosas pero cada dia soy mas pesimista
El exilio a una isla desconectado del mundo, un bunker o un pais serio esta entre mis opciones
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