El cine, como la vida, esta lleno de cosas que pudieron ser y no fueron. Hoy aprovecho para dejar unos cuantos proyectos cinematográficos fallidos pero que terminaron en otras películas que, la verdad, no están nada mal.
"El Hobbit", de George Lucas.
Tras el éxito de la saga galáctica, Lucas se decidió a llevar a la gran pantalla la precuela de "El señor de los anillos" pero no logró hacerse con los derechos así que "se inventó" una trama muy parecida en "Willow" (1987, Ron Howard). Película que co-escribió, produjo y (se dice) hasta dirigió sin acreditar es una variación sobre "El Hobbit": los nelwyn, como los hobbits, son seres pequeños y pacíficos, un pueblo lejos de los peligros del salvaje mundo. Willow, como Bilbo y Frodo Bolsón, que se ve obligado a protagonizar una aventura. En su viaje, contará con el apoyo de su mejor amigo, Meegosh (Sam), la ayuda fundamental de héroes como Madmardigan (Aragorn) y Sorsha (Légolas), magos como Aldwin Alto (Gandalf), la ayuda del hada del bosque (Galadriel). Vamos, todo muy original. La película no funcionó bien en taquilla y la idea de hacer una trilogía fracasó pero "Willow" va ganado fans y simpatías desde entonces.
"El Señor de los Anillos", de John Boorman.
“Si el oficio de hacer cine es para mí, como he dicho frecuentemente, explorar, marcarse metas imposibles y fracasar intentando resolverlas, la saga de El señor de los anillos reunía todas esas cualidades”, John Boorman. El director británico tuvo los derechos de la novela de Tolkien durante una década, hizo un guión para una película de tres horas, repartidas la mitad en el primer libro y el resto para los dos restantes, incluyó sexo en escenas como en la curación de Eowyn a manos de Aragorn, una Galadriel más sexy y más protagonismo al personaje de Gilmi. Pero en 1979 Boorman se encuentra sin financiación y decide usar toda la documentación, diseño de decorados y vestuario en una película mítica: "Excalibur" (1981). Obra maestra, Merlin (Nicol Williamson) contra Morgana (Helen Mirren) y la leyenda artúrica. Hubo sexo, hubo épica, hubo belleza, un festival de imágenes, grandes interpretaciones y escenas inolvidables por su espectacularidad e intensidad.
"Napoleón" de Stanley Kubrick.
Sería a la vez un estudio del personaje y una epopeya espectacular, repleta de grandiosas escenas de batallas con miles de extras, escenas subidas de tono y mucha violencia. Tras 2001: Una odisea del espacio (1968), Kubrick se embarcó dos años en una intensa investigación; con la ayuda de una docena de asistentes y un especialista de Oxford en Napoleón, acumuló material documental y de pre-producción, incluyendo aproximadamente 15.000 fotografías de búsqueda de locaciones y 17.000 diapositivas de imaginería napoleónica. El director pensó en Jack Nicholson como protagonista, no pudo ser, pero luego trabajarían juntos en un film de mucho miedo. Finalmente, la película de Kubrick no salió: primero M.G.M. y luego United Artists, decidieron que esa empresa era demasiado arriesgada. Con todo este material, Kubrick rodó para la Warner "Barry Lyndon" (1975) probablemente uno de sus mejores y más cuidados films.
"Superman II", de Richard Donner.
Alexander e Ilya Salkind se hicieron con los derechos del personaje en los años
70, y contrataron a Richard Donner para realizar lo que sería un extenso
largometraje (de cerca de tres horas) sobre el super héroe. Pero desde el inicio
del rodaje hubo ya una gran cantidad de roces entre productores y director, que
terminarían por agravarse con el paso de los meses. Se decide que estrenarla en dos partes, como se anuncia al final de los títulos de crédito de la 1ª. Pero los productores despiden a Donner cuando este tiene rodado un 70% del segundo film: Gene Hackman se larga del rodaje y Marlon Brando demanda a los productores. Richard Lester se encarga de rodar el resto y estrenarlo con un año de retraso. En 2006, Donner hace su propio montaje con lo que se desechó y lo estrena en DVD. El resultado final (hablo del film de Lester) es entretenido y más cómico que la "versión Donner", que es más seria, como la primera parte. El film de Donner parece un corta y pega algo falto de ritmo pero recupera una excelente escena en la que Brando abronca a su hijo por inmiscuirse en la vida de los humanos.
Para más información sobre "Supermán" (1977) me remito a este post en dacosica.
1 comentario:
Es interesante todo lo que nos cuentas Dacosica. Cumples con la máxima horaciana de una literatura que aparte de amenizar, resulta didáctica (jijijiji)
No sabía que John Boorman iba a hacer una versión del Señor..., sin duda habría sido muy distinta de la que se ha rodado al final.
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