El cine en 2016 (primera parte)

Contra todo pronóstico, dacosica ha tenido la oportunidad de ver bastante cine en salas este año, motivo por el cual paso a comentar una parte de él. El propósito es escribir sobre las películas cuando estas están todavía frescas y así hacer una valoración más justa. Si el resto del año no veo más cine pues ya veremos quién se encargará de la segunda parte, pero como que cada día se estrena otra peli de superhéroes que la habrá. Vamos allá.

Palmeras en la nieve de Fernando González Molina
Adaptación de la novela de Luz Gabás, pertenece a un género apenas practicado en el cine español reciente: los melodramas románticos ambientados en momentos históricos, filmes río donde se cuentan historias con romances y dramas, destacando la dirección artística y el reparto de estrellas locales. Bien por Atresmedia y me alegro de su éxito dentro del monocromático cine español.
Cuestión aparte es si logra ser una gran película con su relato ambicioso, que logra buenos momentos, (sobre todo al comienzo, con la llegada del protagonista a Guinea) pero que fracasa en el último momento, con un clímax final tan melodramático como fallido, aunque creo que es más culpa de la historia que del competente director. Con todo, mejor que la media habitual del cine patrio.

Spotlight de Tom McCarthy
Hace bastante tiempo que no me acerco a las películas ganadoras del Oscar, quizás por alguna decepción y puro snobismo, lo reconozco. No sé si Spotlight es la mejor película del año pero sí estoy seguro de que es un gran film. Bien rodada, pues cada plano nos muestra un retrato de la época (año 2001), de los personajes y sus circunstancias (lo que viene a llamarse "puesta en escena"); con una historia que hace que sus dos horas se pasen volando, sin sensacionalismo pero con emoción, nos cuenta el descubrimiento de una terrible realidad que entre todos habían tratado de esconder. Pese a las grandes interpretaciones de su reparto (destaco a un arrugado y comedido Michael Keaton) lo más importante es la descripción de un periodismo que buscaba la verdad a pesar incluso de que esta pudiera perjudicar sus ventas. Algo, por desgracia, imposible hoy día.

Deathpool de Tim Miller
El auténtico sleeper del año, con el mérito de serlo en el trilladísimo género de los superhéroes. Con altísimas dosis de ironía, mala leche y autoparodia, Deathpool es un film que conjuga perfectamente entretenimiento y ese "algo más" que cualquiera debería pedirle a un producto cinematográfico. Haciendo de la necesidad (presupuesto relativamente bajo) virtud, la película tiene su gran baza en que el personaje hable para la audiencia, incluso en medio de escenas de acción, además de ser un ejercicio de metalenguaje cinematográfico: las múltiples referencias por parte del protagonista hacia otras películas y actores (Hugh Jackman, la película de Lobezno donde aparecía por primera vez el personaje, el que el propio Reynolds reconozca que es un pésimo actor, etc.). Si a todo ello se le añade las altas dosis de sexo, lenguaje procaz y violencia que contiene nos queda un experimento tan entretenido como descarado. Queremos más.

Objetivo: Londres de Babak Najafi
Como dije antes del cine oscarizado, el cine de acción del siglo XXI me es casi completamente ajeno. Más allá de "Mercenarios", ni los productos de Vin Diesel, ni Jason Statham me son familiares y tampoco sigo a ese reconvertido actor de acción que es Liam Neeson. Gerard Butler prueba suerte en el género tras el éxito de "Objetivo: la Casa Blanca", intentando salvar de nuevo al presi norteamericano (Aaron Eckhart) de un ataque que pone patas arriba Londres, nada nuevo bajo el sol. Un film con secundarios de prestigio (Morgan Freeman, Jackie Earle Haley, Angela Bassett) que no se lucen mucho, mensaje patriótico y pro-occidental (aunque no se meta con la religión musulmana, nada y guarda la ropa) es bastante entretenida y tiene un tramo final que agradará a los fans de los videojuegos pues parece uno. Digna y olvidable, esperar alguna sorpresa de guion es en vano.
También he visto, no en sala cinematográfica, "Los odiosos ocho" (Quentin Tarantino), que vuelve al western aunque con mejor fortuna que en "Django desencadenado", proponiendo un film que parece una película de misterio pero con su propio estilo de personajes verborreicos, violencia sanguinolenta y homenajes a películas de otros (La Cosa, que también tenía música de Morricone) o suyas (Reservoir dogs). Demasiado larga, es un film que va de menos a más. Creo que hubiera sido mejor verla en cine dado que está rodada en Superpanavisión 70 y siendo como es una película de interiores, en TV pierde espectacularidad.