- Evergreen (Wininger), 1986 EUROCOMIC, Colección Metal
Nicéphore Vaucanson, reportero de la publicación "Le
Petit Pariesien" se embarca en el "Celacanto", que
zarpa del puerto de Nantes. Ha sido invitado a formar parte de una expedición, pero el objeto de la misión es un
misterio para él. Más tarde se enterará que el objetivo tiene que ver
con la misteriosa desaparición de cinco barcos, todos ellos de la misma
compañía, en las cercanías del Cabo de Hornos, y seguían una ruta que antaño fue abierta por varios galeones
de la época de los conquistadores. La magia y el misterio se entremezcla en un sorprendente e inquietante final.
Pierre Wininger (1950) ha publicado desde los años 70 sus trabajos en distintas revistas francesas, destacando la tristemente famosa Charlie Hebdo, "Evergreen" es, que yo sepa, la única historia editada en España. Con un estilo de comic aventurero a lo Hergé pero más denso y adulto, te deja con tres palmos de narices al final porque es una trilogía y ... ¡no han editado los otros dos volúmenes!
Es una lástima porque las posibles costuras de la historia y la lentitud que se le puede achacar quizás sean debidas a ser la primera de tres entregas. No obstante, no carece de interés por su suspense y exquisito dibujo de línea clara.
- Blue (Gauckler, Houssin), 1981 EUROCOMIC, Colección Humanoides
Ambientada en una oscura e insalubre ciudad post-apocalíptica, con tclanes urbanos luchando
por su supremacía y un misterioso y colosal muro que es protegido por unos
extraños guerreros. Blue, el protagonista es el jefe del clan de los
patinadores y tiene una obsesión: cruzar el muro.
Conspiraciones y misterios con estética cyberpunk es lo
que nos ofrece esta obra, con un guión de Jöel Houssin (1953). Escritor y guionista, especializado en ciencia-ficción su trabajo más conocido en España es el guion de la película "Dobermann", adapta aquí su propia novela. El dibujante Philippe Gauckler era habitual de la revista Metal Hurlant cuando dibujó "Blue", su estilo está muy influenciado por sus estudios de arquitectura lo cual hace que los personajes no estén tan bien dibujados como los escenarios, resultando algo inexpresivos.
Deja un regusto amargo por su final que, pese a ello, no deja de resultar tópico: otra vez el apocalipsis nuclear es la explicación de todo. En aquella época estaba prohibido ofrecer una historia con final feliz.
- Pecado Mortal (Béhé, Toff), 1993, Ed. Glénat
Estamos en una Francia distópica, donde un partido de corte fascista gobierna el país con mano de hierro, sin embargo hay un movimiento subversivo que le planta cara. Por el medio, la investigación contra el virus VRH (trasunto del VIH), una cura que se esconde a la opinión pública para mantenerla controlada y favorecer una determinada moralidad desde la Secretaría de Estado para las buenas costumbres. Y, cómo no, un jovencito científico de gafas de intelectual, peinado de punta y una bella joven no menos moderna que se enamoran en medio de una trama que combina traiciones al más alto nivel con escenas de la calle y los bajos fondos...a su favor el final feliz, los cuerpos esbeltos y dibujo magnífico de Joseph Béhé, nacido en Alsacia y que en un principio se dedicaba a la historieta cómica. En su contra, el que ha envejecido fatal y está llena de tópicos, además de recrearse con efectismo en la violencia y los ambientes y situaciones de degradación. El guión es de Jean Christoph Deloulme alias Toff, que se dedicaba a la investigación científica. En origen se publicó en la revista Pilote.
- La superviviente, 1985, (Paul Gillon), Toutain Editor
Otra obra influenciada por la paranoia nuclear, el terror a al totalitarismo y la desconfianza hacia las máquinas, eso sí, con mucho erotismo. Aquí tenemos la primera de cuatro partes en las que se divide la historia, algo pretenciosa, en la que la protagonista (una joven parisina) es sorprendida por el apocalipsis nuclear mientras hace submarinismo quedando como la única habitante de la tierra (sic). Tan descabellado planteamiento da para que luzca el artista mostrando a la sexy joven desnuda, y a un desértico París inquietante. Tiene algún golpe de divertida mala leche (el Gobierno ha sobrevivido convertido en zombies caníbales) y una bizarra escena de sexo robot-humana. El trágico final es sólo el comienzo de una tetralogía que no he leído pero que según wikipedia tiene toques a lo "V de Vendetta" y un final estilo "Incal". En fin, eran otros tiempos y otras tendencias.
Gillon (1926-2011) fue un dibujante y guionista muy reconocido en su país que logró gran éxito con la serie "Los náufragos del tiempo" (1968-1983), especializado en ciencia ficción y erótico.
- Pecado Mortal (Béhé, Toff), 1993, Ed. Glénat
Estamos en una Francia distópica, donde un partido de corte fascista gobierna el país con mano de hierro, sin embargo hay un movimiento subversivo que le planta cara. Por el medio, la investigación contra el virus VRH (trasunto del VIH), una cura que se esconde a la opinión pública para mantenerla controlada y favorecer una determinada moralidad desde la Secretaría de Estado para las buenas costumbres. Y, cómo no, un jovencito científico de gafas de intelectual, peinado de punta y una bella joven no menos moderna que se enamoran en medio de una trama que combina traiciones al más alto nivel con escenas de la calle y los bajos fondos...a su favor el final feliz, los cuerpos esbeltos y dibujo magnífico de Joseph Béhé, nacido en Alsacia y que en un principio se dedicaba a la historieta cómica. En su contra, el que ha envejecido fatal y está llena de tópicos, además de recrearse con efectismo en la violencia y los ambientes y situaciones de degradación. El guión es de Jean Christoph Deloulme alias Toff, que se dedicaba a la investigación científica. En origen se publicó en la revista Pilote.
- La superviviente, 1985, (Paul Gillon), Toutain Editor
Otra obra influenciada por la paranoia nuclear, el terror a al totalitarismo y la desconfianza hacia las máquinas, eso sí, con mucho erotismo. Aquí tenemos la primera de cuatro partes en las que se divide la historia, algo pretenciosa, en la que la protagonista (una joven parisina) es sorprendida por el apocalipsis nuclear mientras hace submarinismo quedando como la única habitante de la tierra (sic). Tan descabellado planteamiento da para que luzca el artista mostrando a la sexy joven desnuda, y a un desértico París inquietante. Tiene algún golpe de divertida mala leche (el Gobierno ha sobrevivido convertido en zombies caníbales) y una bizarra escena de sexo robot-humana. El trágico final es sólo el comienzo de una tetralogía que no he leído pero que según wikipedia tiene toques a lo "V de Vendetta" y un final estilo "Incal". En fin, eran otros tiempos y otras tendencias.
Gillon (1926-2011) fue un dibujante y guionista muy reconocido en su país que logró gran éxito con la serie "Los náufragos del tiempo" (1968-1983), especializado en ciencia ficción y erótico.
Bueno, pues esto es todo, imagino que estos tebeos aún serán recordados en Francia mas dudo mucho que las nuevas generaciones los conozcan (yo mismo no sabía ni de su existencia) y si bien no todo tiempo pasado fue mejor nunca está de más recordarlo, más que nada para disfrutar de otro estilo de cómic que terminó siendo un testimonio de su época.
Referencias:
http://miscomicsymas.blogspot.com/2009/09/pierre-wininger.html
https://www.tebeosfera.com
https://www.lambiek.net/artists/b/behe.htm