25 nov 2012

El curioso caso de Topo Soft

Dentro del gran número de cías españolas que durante los 80 fueron líderes exitosas del software de entretenimiento (videojuegos, que se dice) está el curioso caso de Toposoft. El nombre se supone que viene del primer emplazamiento de la compañía: un garaje, aunque tampoco está muy claro.
Topo llegó a la escena del videojuego bastante más tarde que el resto de competidoras, pero no tardó en hacerse un hueco importante gracias a la calidad de sus trabajos. Todo comenzó en 1987 cuando un par de jóvenes programadores (Javier Cano y Emilio Martínez) intentaban vender, sin demasiado éxito, en el rastro de Madrid un juego educativo de geografía, MapGame, pero alguien de ERBE se fijó en ellos. La empresa creada por Paco Pastor cantante de Fórmula V (luego director de SEGA España) y Andrew Bagney (q.e.p.d.), director de Nintendo España, era una importante distribuidora de juegos y  tras lanzar, todavía como ERBE, Las tres luces de Glaurung (un arcade de plataformas) crean Toposoft.
Los primeros juegos fueron Spirit y Survivor, juegos mezcla de arcade y aventura, el primero protagonizado por un pequeño mago, el segundo por un alien que escupía ácido.
El éxito llegó al año siguiente con un juego mítico, Emilio Butragueño fútbol, del que se vendieron 100.000 copias (!). Otros éxitos fueron Desperado (arcade en ambiente western), Mad Mix Game (variación del comecocos), Coliseum (carreras de cuádrigas), Chicago´s 30 o Lorna (según el cómic de Azpiri). Con sus atractivas portadas, la mayoría del ya citado Azpiri, sus buenos gráficos (para la época) y lo original de sus planteamientos tuvieron un éxito tan grande como fugaz. El relativo fracaso del muy ambicioso "Viaje al centro de la Tierra", marca el inicio de su declive del que buenos juegos como "La Espada Sagrada" o "Zona 0" pudieron salvar.
La llegada de los 16 bits y la crisis de ERBE en 1993 marcan el fin de una época. Se suma a los JJ.OO. de Barcelona con dos juegos, uno de atletismo y otro de gimnasia, modernizan, el Emilio Butragueño con una segunda parte, revisan el exitoso Perico Delgado madiot amarillo con Tour 91, sacan el Drazen Petrovic basket (cobran una indemnización cuando este deja el Madrid por la NBA) y se lanzan al mercado internacional con Gremlins 2, la nueva generación pero todo es en vano.
Obtiene un modesto éxito con Luiggi & Spaggetti, lanzan un juego de rol-estrategia, Black Crown, los juegos son cada vez mejores gráficamente pero ya no gustan ni son tan adictivos. La puntilla la pone el desastre económico de ERBE, quien entra en una situación económica delicada tras el incendio (intencionado según los bomberos) de su almacén y la pérdida de su exclusiva con Nintendo. Tras ser comprada por Anaya, ERBE forma parte en la actualidad del conglomerado  Activision Blizzard, creadores de Warcraft y Guitar Hero.
Si queréis jugar ahora como si de un Spectrum se tratara con los juegos de esta mítica compañía española aquí tenéis el enlace.
http://dimensiontopo.com/

2 comentarios:

El Pera dijo...

La banda sonora de esta entrada debería ser "Cuando fuimos los mejores"... y Topo Soft, Dinamic y Opera Soft competían exitósamente en el mundo de los videojuegos para ordenador, que por entonces ya empezaba a prometer. Luego lo de siempre, el beneficio cortoplacista y la incapacidad para prever la evolución del mercado, de la tecnología y la falta de adaptación a la nueva realidad. Pura Iberia. Con todo, creo que Dinamic sobrevive bastante bien convenientemente reconvertida, lanzando juegos decentes en lo que podríamos llamar "Serie B". Algo es algo.

Siendo, como soy, fan de Opera Soft, Topo quedaba relegado en mis preferencias a un tercer lugar, también por detrás de Dinamic y a cierta distancia. Quizá porque nunca logré engancharme realmente a sus juegos. Y también, a qué negarlo, porque su gusto por los colorines hacía que en mi monitor verde los gráficos de sus juegos lucieran reguleros.

Recuerdo la decepción que me llevé con el "R.A.M", juego de dificultad tan demencial que empezabas con 10 vidas o así y pese a ello no pasé del cerro aquél en el que llovían misiles "inteligentes", - quien lo haya jugado me comprenderá, y si llegó más lejos le ruego sus trucos...). O con el "Drazen Petrovic", el peor juego de baloncesto de la historia. Sin exagerar.

El "Viaje al Centro de la Tierra" era buenísimo en cambio. No sabía o no recordaba que hubiera fracasado. Una pena, porque era de lo mejorcito. Incluso reducido a tres fases. Seguramente lo sepas, pero por si acaso: en Computeremuzone han colgado las otras fases que no se incluyeron en la versión final:

http://computeremuzone.com/ficha.php?id=759

Al que más hora dediqué, sin embargo, fue al "Tour 91", Indurain de moda mediante, claro. Un gran juego, actualizando y mejorando otro gran juego como fue el "Perico Delgado".

P.D.: El "Black Crown" necesitaba un tablero para jugar. ¡Era un juego de ordenador y de mesa a la vez! muy intuitivo todo, vamos. En un momento en el que triunfaban las aventuras de Lucasfilm alguien pensó que tal mezcla era una "buena idea". Si eso no era la última señal para abandonar despavorido el barco, cualquier barco, que baje Dios y lo vea.

P.D.2: Lamentable una vez más la prensa "especializada" inglesa y su política de desprecio sistemático a cuanto juego español cayó en sus incapaces manos. Ocean no necesitaba esas ayuditas (pero supongo que las demás sí)...

Mr. X dijo...

El de Perico Delgado me suena... ¿jugábamos a ello pispo, dacosica?