8 feb 2025

Viaje al fondo de la mente

Satoshi Kon (1963-2010), cineasta y guionista japonés, es uno de tantos directores de los que su cortísima filmografía nos lleva a lamentar su precoz fallecimiento. Realizador que comenzó su actividad profesional a comienzos de los 90, cuando el famoso "Akira" (1988) de Katshuiro Otomo llega a occidente precedido de un gran éxito en su país de origen, primero como manga y luego como película de animación. Tuvo una sólida formación en diseño gráfico y dibujando manga antes de dedicarse a la dirección. Además, en su juventud conoce a Otomo, con el cual colabora en su largometraje "Qué horror de apartamento" (1990), todavía rodada en acción real. Kon empezó, como tantos otros realizadores nipones en el anime dibujando, diseñando personajes y escribiendo historias originales o bien adaptado las de otros.
"Rosa magnética" según el cómic de Katshuiro Otomo
Su primera experiencia en la dirección es en la serie Jojo's bizarre adventure, serie de acción, ultravioleta y directamente a video (OVA, para los expertos). Tras esta, colaborará con Otomo en "Memories" una película de tres episodios que tienen en común el género ciencia-ficción aunque muy variado. Kon adapta la historia del autor de "Akira" ofreciendo lo que ya será su sello: la compleja mente humana, sus miedos y anhelos todo ellos con una impecable animación y siempre en escenarios espectaculares, barrocos y surrealistas. "Rosa magnética", cuenta la historia de unos basureros espaciales que acuden a una señal de socorro y lo que allí se encuentran no es lo esperado. Satoshi tendrá la oportunidad de debutar en el largometraje adaptando una historia ajena y ofreciendo lo que ya se apuntaba en el segmento de "Memories": la complejidad de la mente humana. 
La inquietante "Perfect Blue" es una película llena de matices

"Perfect Blue" (1997), adaptación de un best seller de Yoshikazu Takeuchi, cuya realización iba a ser un acontecimiento en el país nipón. En el último momento, por temas presupuestarios, el film pasó a ser de animación en vez de acción real y cayó en las manos de Kon, el cual aprovechó para firmar un thriller desasosegante, casi de terror y, de paso, darse a conocer en todo el mundo. 
Mima es una cantante juvenil que decide dejar su exitoso grupo para iniciar una carrera como actriz y así dejar atrás su imagen angelical más el  éxito no es un camino de rosas: las series y películas que rueda le obligan a interpretar personajes al borde de la locura, lo cual la afecta personalmente. Además, una sesión de fotos en la que sale desnuda (pese a que no quería) sale a la luz y su mundo se viene abajo, iniciando una serie de acontecimientos que la hacen perder el control de su mente.
Pese a no tratarse de un guion propio, Kon hace suyos los temas de la fama, el fenómeno fan, la frustración, la manipulación y la frivolidad del mundo del espectáculo que termina por destrozar reputaciones y personas. Una película excelente, impactante, por instantes confusa pero que su realizador logra llevar a buen término logrando que ningún cabo de la intriga quede suelto. 
"Milenium actress" es una romántica película de cine dentro del cine 

Da la sensación de que el personaje de Chiyoko en "Milenium actress" (2001) es una extensión de la  Mima de "Perfect Blue". No sólo por su parecido físico e idéntica profesión, sino también por su carácter obsesivo y misterioso.
Un cámara y un patoso periodista logran entrevistar a la huidiza protagonista, una actriz que, en la cumbre de su carrera, decidió retirarse por razones desconocidas. Ahora, al borde de la muerte, hace balance de su vida buscando en su memoria la solución a un secreto.
Con saltos continuos en el tiempo, mezclando las películas y rodajes de Chiyoko con la vida ¿real? de la protagonista, vamos descubriendo que el secreto está relacionado con un misterioso joven al que conoció siendo adolescente, mas pronto se descubre aquello tan cierto de "no es dónde vas sino con quién". De paso, Kon hace un sentido homenaje al cine japonés, tocando todos los géneros: samuráis, drama de época, realismo social, ciencia-ficción y, cómo no, Godzilla. Un film donde el realizador ya anticipa lo que será el tema de su tercer film: los personajes marginales y secundarios que acaban siendo importantes en la vida de los teóricos protagonistas. Una película rabiosamente romántica y excepcionalmente bella. 
Los protagonistas de "Tokyo Godfathers", seres en busca de redención

"Tokyo Godfathers" (2003) es un cuento de Navidad y como tal hay que tomarlo. Protagonizada por un curioso trío de sintecho formado por un homosexual con instintos maternales, un alcohólico que abandonó a su familia y una adolescente que ha huido de casa tras un dramático enfrentamiento con su padre. Éste peculiar trío se encuentra un bebé en la basura y tratan de devolverla a su madre sin acudir a la policía pues a ninguno les conviene dar explicaciones. 
Con una mezcla de comedia algo infantil (esa gestualidad tan exagerada a veces, casi un sello de cualquier producto anime), drama, premio de lotería y película de intriga con la yakuza de por medio porque a Kon no parecen gustarle mucho las historias en las que todo parece ir la dirección esperada y busca la sorpresa del espectador aún a costa de la verosimilitud. No es un defecto, en éste caso, pues la emoción que transmite la historia, la humanidad de los protagonistas (que no son buenas personas sin más, tienen defectos, de ahí que se ganen nuestra simpatía) y la incertidumbre por su resolución enganchan completamente al espectador consiguiendo lo que toda película navideña debe hacer: emocionar. Por último destacar la música de Keiichi Suzuki, que rara vez compone música para animación y por eso le da un toque distinto al film. 
"Paprika, detective de los sueños", un thriller de fascinante factura 

Adaptación de la novela de Yasutaka Tsutsui, autor que también fue adaptado en la exitosa "La chica que podía saltar a través del tiempo", "Paprika, detective de los sueños" (2006) es quizás la obra más ambiciosa e influyente del realizador de Sapporo. 
Thriller que cuenta la historia de una científica Atsuoko Chiba, que utiliza una revolucionaria máquina creada por una gran corporación para entrar en la mente de las personas y solucionar sus problemas psicológicos. Pero alguien ha robado la tecnología y la está usando para atacar a las principales personas relación el proyecto. Además, un detective de policía se está sometiendo a un tratamiento con Paprika (avatar en los sueños de Chiba) para solucionar un antiguo caso sin resolver. 
Cuanto más se profundiza en la mente, más enrevesada y misteriosa es la trama, de un barroquismo exacerbado en las escenas oníricas (volvemos a la estética del segmento 'Rosa magnética' de "Memories") lo que parece conducir hasta un desenlace que parece no tener sentido... Hasta que se descubre al malo de la función.
No creo exagerar si digo que "Paprika..." es una de las películas anime más influyentes de los últimos años. Su trama está claramente copiada por Nolan en la excelente "Origen" (2010) y la idea de la realidad alterada desde los sueños (que pueden utilizados con fines homicidas, tipo "Pesadilla en Elm Street", de Wes Craven) hacen de este film una experiencia realmente sugestiva, que provoca en el espectador no sólo sorpresa sino también reflexión en una trama que, como los sueños, lo abarca todo: el deseo sexual, la frustración, los complejos, los anhelos, el amor, las fobias y la culpa. Todo ello con homenajes cinéfilos, en la trama del detective, y algún momento cómico.
Una película que, como todas las del realizador, se cierra con una explicación perfectamente coherente y honesta. 
Protagonistas de la inacabada 'Dreaming machine' 

Por desgracia para el séptimo arte, durante la producción de "Dreaming machine" el que iba ser su quinto largometraje, Kon recibe la noticia de que padece un cáncer terminal. Deja todo para pasar sus últimos meses de vida con su familia y amigos dejándonos huérfanos de nuevas historias, nuevos mundos oníricos y personajes complejos y torturados, humanos en una palabra.